lunes, 30 de enero de 2012

Yo, mi, me,...contigo - David Safier

Esta es la tercera novela de David Safier que comento en el blog y me temo que voy a tener que repetir mucho de lo ya dicho cuando recomendé Maldito Karma y Jesús me quiere, porque el estilo propio del autor destaca por encima de todas ellas.
Como ya he dicho en anteriores ocasiones, David Safier escribe novelas partiendo de hechos absurdos, y hace que sus protagonistas, gente normal, se enfrenten a sí mismos a través de las vivencias que dichos hechos les provocan. En Maldito Karma la protagonista se reencarnaba en animales y  en Jesús me quiere, otra chica se enamoraba de Jesucristo, aparecido en carne y hueso en la actualidad.
En este caso, nuestra protagonista (me acabo de dar cuenta de que David Safier siempre elige mujeres para sus personajes principales) se trasladará al interior de Shakespeare, por mediación de un mago, para descubrir el verdadero amor.
La historia, a través de los malentendidos típicos del choque cultural entre la sociedad actual y el siglo XVI, y de las diferencias típicas entre hombres y mujeres, irá avanzando con anécdotas, aventuras, reflexiones,... todo ello con un lenguaje típico de los monólogos de humor.
El objetivo que Safier pretende del lector es que pase un rato divertido y, de paso, saque conclusiones útiles para la vida. Lo del rato divertido va por gustos, hay chistes inteligentes, otros un poco más fáciles y algunos para los que hay que saber inglés o conocer a personajes de la sociedad y la televisión alemana. Yo, que no soy de risa fácil, no le acabo de ver la gracia a casi ninguno, pero por lo menos hace la lectura entretenida.
Y de lo de la moraleja, que nadie espere grades hazañas, va más en relación con las conclusiones típicas de series adolescentes y cuentos infantiles que con reflexiones filosóficas.
Pero en general es una lectura entretenida y amena. Creo que ya lo he dicho en alguna ocasión, pero la veo muy útil para las tardes de verano, cuando el sol nos tiene el cerebro refrito en la playa o la piscina.
Un último apunte. Me llamó la atención el título, sobre todo porque me imaginaba que la alusión a la lista de los pronombres, que muchos nos aprendimos de pequeños, era más bien española. Vamos, que no me creía yo que en Alemania el título fuera ese y, estaba en lo cierto. En realidad si traducimos literalmente el título alemán sería "De repente Shakespeare". ¿Por qué cambiarlo?, desconozco la razón pero me imagino que no sonaba lo suficientemente ligero y apetecible como para que se anime a leerlo su público potencial.
Así que todos los que busquéis en la lectura un pasatiempo divertido, aquí tenéis un buen ejemplar.

lunes, 23 de enero de 2012

La primera noche - Mark Levy

Está reseña es continuación de la de la semana pasada: "El primer día".
Otra característica típica de las novelas de Mark Levy es que venden humo (y no acabo de entender qué ganan con ello). “Las cosas que no nos dijimos” se vendía como una historia de relación padre-hija, aunque la mayor parte de las páginas contaban una historia de amor entre la hija y un novio del pasado. En este caso, estas novelas se venden como una historia de amor, y la mayor parte de la historia está dedicada a buscar unas piedras por los confines del mundo.
Y este aspecto es otro de los que quisiera aclarar, porque me parece importante saber a qué te enfrentas cuando te propones leer una novela (y más en este caso que entre ambas rondamos las 900 páginas). “El primer día/La primera noche”  es una historia que, salvando las distancias, se parece a “El Ocho”. Se trata de un astrónomo y una arqueóloga dedicados en cuerpo y alma a buscar una serie de piedras que, en ciertas condiciones, ofrecen una información valiosísima. Al tiempo un grupo de personas tratarán de impedir que lleguen a conseguir su objetivo. Entre medias va sucediendo la historia de amor entre los protagonistas, y también entre alguno de los personajes secundarios.
Se trata, en conclusión, de unas novelas entretenidas de leer, planteadas a modo “Best Seller”, donde misterios y dobles juegos entre los personajes te mantienen en vilo, y donde el final mostrará una gran verdad a modo de moraleja.  Mark Levy se va a plantear todas las grandes preguntas de la humanidad: ¿de dónde venimos?, ¿quiénes somos?... y va a dar una de las posibles respuestas que la ciencia contempla. Pese a todo, el final, a mi juicio, decepciona.
Recomendable para aficionados a las historias de misterio, piedras, arqueología,… y para los fieles a Mark Levy. No tanto para los que busquen una historia de amor (pese a que la vendan como tal).

lunes, 16 de enero de 2012

El primer día - Mark Levy


Hay ocasiones en que una novela te lleva a otra. Ocasiones en que una lectura te ha gustado y te animas a leer la secuela con la esperanza de encontrar las mismas sensaciones que en la primera, aunque en el fondo eres consciente de que casi nunca sucede así. Y ocasiones en que directamente es la secuela la que te llama la atención.
Visitando páginas de libros por Internet me encontré con “La primera noche” de Mark Levy; y me gustó lo que decía sobre ella. Me pareció interesante el planteamiento y, aunque su gran éxito: “Las cosas que no nos dijimos” no me acabó de convencer, opté por darle una segunda oportunidad. Sólo que en este caso la segunda oportunidad en realidad es la tercera, porque “La primera noche” es la continuación de “El primer día”.
Así que aquí estamos, comentando “El primer día”, porque me llamó la atención “La primera noche”.
Lo primero que quisiera aclarar es que ambas novelas están concebidas como una sola. No es el típico caso en el que un autor escribe algo, tiene éxito y decide continuar la historia. En este caso “El primer día” es una mitad de la historia, con un final relativo, que pide más.
Las novelas son típicas de Mark Levy. Se trata de un autor que sustenta la narración en los diálogos. Prácticamente el 75% de la novela son diálogos. Incluso si necesita explicar o narrar algo se las apaña para que sea un personaje el que se lo cuente a otro. Y esto en cierto modo es una ventaja, porque hace que la lectura sea mucho más viva, más divertida. Además, suele incluir personajes mordaces, con comentarios agudos y ligeramente cómicos, que hacen que ciertos pasajes sean muy cómodos de leer.
En este sentido, el "pero" es que muchos de los personajes son totalmente estereotipados. La prueba está en que ciertos personajes de “El primer día/La primera noche”, se parecen mucho, sobre todo en su forma de hablar y en el rol que tienen, a los de “Las cosas que no nos dijimos”. Te da la sensación de estar viendo una  serie americana (se me viene a la cabeza CSI), donde los personajes son siempre los mismos aunque cambien de actor y ciudad.
Al igual que hace Mark Levy con "El primer día", la reseña continuará la próxima semana cuando os hable de "La primera noche"

lunes, 9 de enero de 2012

La mano invisible - Isaac Rosa

"La mano invisible" de Isaac Rosa, es una de las novelas más originales que he leído en los últimos meses. Me acerqué a ella porque en la contraportada destacaban que, contra lo que suele ser normal, los protagonistas de esta historia trabajan mucho, constantemente.
El planteamiento, de puro simple, resulta muy complicado. En el primer capítulo un albañil levanta un muro de ladrillo. Paso a paso va haciendo todo lo necesario para que el muro quede perfecto. Nos va contando todo lo que hace y en lo que piensa cuando lo hace. Nos cuenta cómo es el trabajo de albañil. Recuerda otras obras que ha hecho y reflexiona sobre todo lo referente a su oficio. Pero hay algo que no encaja. Se supone que le observan trabajar (algo muy frecuente en nuestro país, donde no hay obra que se precie sin mirones), pero él no ve a quién le observa, sólo los escucha. Y al final del capítulo ocurre algo desconcertante, cuando ha acabado el muro, coge un mazo y lo tira a golpes. Después recoge los escombros y vuelta a empezar.
La narración va avanzando y descubrimos que en una nave hay más personas haciendo otros trabajos: un mecánico, un empleado de matadero, una costurera,...  trabajando de un modo repetitivo, sin otro fin que trabajar y ser observados. Y ninguno parece saber por qué.
En realidad la novela es una de las mejores reflexiones que me leído sobre el mundo laboral. Irá analizando hasta el último detalle cada uno de los trabajos, para que entendamos por lo que pasan cada uno de ellos en su día a día. Pero sobre todo desmontará toda una serie de mitos sobre el trabajo: que es un modo de realizarse como persona, que se hace sólo por dinero, de qué son capaces los empresarios por aumentar la productividad,... Comprenderemos toda una serie de relaciones interpersonales entre compañeros, así como entre jefes y empleados y seremos testigos de cómo nos comportaríamos si nuestro día a día se viera sacado de contexto.
No es una novela sencilla, puede que ni siquiera amena, pero te hace pensar en muchas cosas que, de otro modo, pasarían desapercibidas.
Recomendable para todo el que tenga curiosidad por el trabajo de los demás y ganas de reflexionar por las verdaderas motivaciones que le llevan a levantarse todos los días para ir a trabajar.

lunes, 2 de enero de 2012

El Ocho - Katherine Neville

Hace tiempo, una persona muy cercana a mí fue testigo de como un dependiente de una librería aconsejaba a unas clientes sobre un libro para ser regalado. No sabían qué libro escoger y el dependiente no dudó: ¿ha leído El Ocho?. Según él, era el libro que más veces había recomendado y no solía fallar.
Cuando me lo contaron me dio cierta rabia, porque fue un libro que en su día empecé, pero que tuve que dejar porque en clase me obligaron a leer otro (que ahora mismo no recuerdo, por lo que no me marcó demasiado).
Así que me prometí a mi mismo que, en cuanto pudiera, volvería a intentar leerlo.
Recomendar El Ocho, de Katherine Neville, es algo muy fácil. Supongo que será de los libros más leídos y, por lo que he podido sondear a mi alrededor, tiene la capacidad de enganchar a todo el que lo empeiza.
Está escrito como un Best Seller. Es decir, no requiere ningún tipo de esfuerzo, dado que la narración es sencilla y cercana.
En realidad es una historia doble, que irá avanzando de modo paralelo hasta el final. Una de las historias está ambientada en el siglo XX, donde una especialista en Informática, a través de un encargo, se ve inmersa en la búsqueda de unas viejas figuras de ajedrez, a las que se les atribuye un gran poder. La otra historia se sitúa en el siglo XVIII, en el momento en el que la abadesa de Montglane se ve obligada a desperdigar a través de las mojas de la abadía, dichas figuras del ajedrez, para evitar que caigan en las manos equivocadas.
Y es que en realidad la motivación de la novela es doble. Por un lado la búsqueda de las piezas, para lo que sucederán un montón de aventuras que mantienen el hilo de ambas historias. Y por otro lado el poder del ajedrez, que ambas protagonistas, la del XVIII y la del XX tendrán que averiguar para comprender a lo que se enfrentan.
En cierto modo esta novela es la "madre" de toda una serie de imitaciones que surgirán a lo largo de los años, donde unas piezas con poderes sobrenaturales moverán a ciertas personas a vivir aventuras colosales. En la contraportada de la edición de bolsillo aparece una recomendación de Javier Sierra, autor entre otros de "El ángel perdido", del que os hablé el curso pasado y la comparación es inevitable (y por otro lado odiosa). Javier Sierra intentar cocinar con los mismos ingredientes que Katherine Neville, pero el plato queda menos sabroso.
Como no podía ser de otro modo, una lectura muy recomendable para todos. Casi diría que imprescindible